"La época que pase con Hawkwind fue mágica. Acostumbrabamos a colarnos en una enorme mansión abandonada para fliparnos. El edificio principal había ardido y estaba rodeado por unos inmensos jardines tomados por las malas hierbas, entre las que discurrían estrechos senderos, estanques y túneles. Era una locura. El grupo al completo, acompañado de unas diez chavalas y otro par de tios, saltaba la tapia y se dedicaba a colocarse y a vagar por allí dentro. De vez en cuando te encontrabas a alguno hecho un ovillo debajo de un árbol, balbuceando. El verano del 71 fue genial. ¡No me acuerdo de nada, pero nunca lo olvidaré!"
Lemmy Kilmister (Motorhead), AUTOBIOGRAFIA